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Musictip

recursos musicales

¿Sonorizamos un cuento?

Creamos el sonido de un cuento inspirándonos en el trabajo de los artistas Foley

Una actividad que les encanta a los alumnos en clase de música es poner música a un cuento dado. Se trata de una actividad que se puede hacer en dos o tres sesiones, para al finalizar poder exponer cada grupo su trabajo realizado.

Los pasos para poder realizar esta actividad son:

1- Elegir un cuento y leerlo.
2- Localizar todos los momentos o elementos del cuento que suenen y marcarlos para distinguirlos.
3- Visualización de un video demostrativo del arte del Foley

4- Espacio para que busquen, experimenten y pongan sonido a todos esos elementos que han subrayado.
5- Con un teclado se complementa el Foley y se pone sonido a los diferentes elementos que no suenan o no podemos imitar. Por ejemplo:

grafía musical contemporanea
Grafía musical contemporánea extraida del libro Piano Actual, Cuentos musicales para niños de 7 a 99 años

6- Una vez acabado el trabajo grupal se presenta en clase a los compañeros y si se puede se graba, para que quede un buen registro del trabajo creativo.

La vaca lola

Cantajuego para aprender los animales

La vaca Lola es una canción divertidísima, en la que vamos repitiendo la estrofa señalada anteriormente, mientras vamos cambiando el sonido del animal. Es un juego que funciona realmente bien con niños y aulas de a partir de 3 años.

Nosotros la acompañamos con unos huevos como shakers para acompañar con el ritmo y hacerla más dinámica. Cada vez que la estrofa se acaba, son los mismos niños que se dan cuenta si el sonido es el de la vaca, y entonces gritan un sí o un no, participando en el juego.

Para finalizar la canción es importante volver a la primera estrofa para que los niños puedan entender que el juego se ha concluído y poder pasar a otra actividad o canción.

Letra de la canción

La vaca Lola, la vaca Lola

Tiene cabeza y tiene cola

La vaca Lola, la vaca Lola

Tiene Cabeza y hace Muuuuu

– Siiiiiii…!!!

La vaca Lola, la vaca Lola

Tiene cabeza y tiene cola

La vaca Lola, la vaca Lola

Tiene Cabeza y hace Kikirikiiiiiii

– Nooooo….!!!

El balancín, cantajuego

Un cantajuego que les encanta a los más pequeños

A los bebés les encanta ser balanceados, y más si es su familia querida la que le coge y mece. Las hamacas son un accesorio idóneo para mecer de forma segura a los pequeños, bien sea con una nana o canción de cuna, una música relajada, o incluso con un canción tradicional:

A la sillita de la reina.

Que nunca se peina.

Un día se peinó

y cuatro pelos se quitó:

1, 2, 3, 4…

Si lo hacemos como un juego será algo más estimulante, pero si tenemos la oportunidad de poner una música instrumental tranquila, o cantar nosotros mientras mecemos al bebé, lograremos un efecto relajante y sedante.

Propuesta de músicas:

  • Preludio nº 4 en Mi menor, Fréderic Chopin
  • Nocturno nº 2, Fréderic Chopin
  • Now we are free, Gladiator BSO
  • Air sonate, J.S.Bach
  • Nubole bianche, Ludovico Enaudi
  • The waves, Ludovico Enaudi
Si tenemos un grupo al cargo podemos utilizar colchonetas o mantas y organizar la actividad por parejas.

El submarino

Unas esterillas y una música adecuada... ¡Los pequeños quedan encantados!

El submarino es una actividad que les encanta a los pequeños. Necesitamos unas esterillas, alfombras, o alguna alternativa que nos permita desplazar de modo seguro a los niños por el espacio. Esta actividad es idónea, porque permite estar a los más inquietos activos y observando, y a los más tranquilos tumbarse y relajarse.

En la actividad proponemos que vamos a realizar un pequeño viaje en submarino, y que se han de montar en las esterillas porque el submarino arranca; esto tiene sentido, porque utilizamos la canción de yellow submarine de los Beatles, pero se puede modificar y adaptar a cualquier tipo de viaje con otras músicas; podemos irnos a diferentes culturas, a altas montañas, etc.

Los más pequeños disfrutarán de la actividad si se repite tal como la proponemos, pero a partir de los 3 años, los pequeños gozarán si además de la actividad proponemos cambios de lugares estimulándoles la imaginación.

Esta actividad forma parte del programa de relajación, ya que se puede realizar justamente después de un baile, o una actividad de movimiento, y aún así funcionará perfectamente: los niños se relajan y relajan el cuerpo. Podemos acabar así la sesión de música, o aprovechar el momento y proponer una actividad sensoria, creativa, o cualquier canción tranquila: los pequeños estarán dispuestos a participar y disfrutar.